El 14 de abril de 1931 se proclama la II República Española, tras las elecciones municipales celebradas el 12 de abril, el gobierno provisional integrado por republicanos y socialistas se hace cargo de la situación, convocando cortes constituyentes para el 18 de junio de 1931.
La toma de posesión del Ayuntamiento Republicano en la Villa de Adeje tiene lugar el 17 de abril de 1931, según el Acta de Pleno: “En la Villa de Adeje a diez y siete de abril de mil novecientos treinta y uno, reunidos en el Salón de Sesiones, el Alcalde saliente Don José Esquivel Alayón y Don Rafael Melo Alayón, Alcalde Republicano elegido por el Gobernador Civil Don Antonio Laraz Zárate, el primero ordenó al Secretario D. Antonio García Cabrera le diese lectura a un escrito del Gobernador Civil ya indicado, en el cual se ordena se dé posesión al ya mencionado Alcalde D. Rafael Melo Alayón de dicho cargo, seguidamente y mediante las formalidades debidas tomó posesión del aludido cargo el referido D. Rafael Melo Alayón”.
En la primera sesión plenaria del Ayuntamiento Republicano, celebrada el 25 de abril de 1933, se acuerda, conforme al artículo 29 de la Ley Electoral, dar posesión a los concejales del Ayuntamiento con la presencia del Señor Alcalde D. Rafael Melo Alayón, procediendo a la votación para la designación de Alcalde, resultando el escrutinio de la siguiente forma: Don Rafael Melo Alayón, seis votos con cuatro papeletas en blanco. Acto seguido se procedió a la elección de los tenientes de alcalde, Depositario y Regidor Síndico. Para primer teniente de alcalde, Don Francisco Lima Trujillo, para segundo Don Manuel Prieto Medina, para Depositario Don José García Rodríguez y para Regidor Síndico Don Manuel Rodríguez Vargas.
En el Acta de 3 de febrero de 1933 cesa el Alcalde D. Rafael Melo Alayón y se designa una Comisión Gestora formada por Doña Consuelo Díaz Pérez, Don Manuel Ferrera González y Don Juan de León Meneses, nombrando Presidente a Don Manuel Ferrera González.
En la Sesión Ayuntamiento Pleno del 10 de abril de 1933 se elige alcalde, con 7 votos a favor y cuatro en blanco, a Don José Esquivel Alayón.
"En la Villa de Adeje 18 de mayo 1933
Moción del Alcalde Presidente D. José Esquivel Alayón
Señores compañeros: al tener el honor de reunirme por primera vez para celebrar esta sesión donde se han de tratar los asuntos enumerados en la orden del día circulada previamente, antes de entrar de lleno en la discusión, quiero por medio de esta carta moción hacer un ruego, una súplica; que de ser atendida sería la mayor recompensa que habría de recibir en este honroso cargo para el cual inmerecidamente me habéis designado, no me ha traído al Ayuntamiento, ni esta ocasión ni en ningunas otras en las que he desempeñado este cargo ansias de un medro personal ni un deseo de riquezas, no: del ser propuesto para el cargo de Concejal, quizás en esta ocasión más que en ninguna otra, por la división que podrá observar de opiniones y otras causas que no necesito enumerar, acepté el cargo a disgusto y con algo de contrariedad, no por qué no deseaba coayudar en esta labor ciudadana, sino simplemente por las causas que dejó apartadas, la división de opiniones.
Llegado este momento, y es este precisamente el ruego que os quiero hacer, mi mayor satisfacción sería, que aun sin apartarse cada cual de su credo político, que justamente debe ser respetado por todos, al pasar de la puerta del Salón de Sesiones para ocupar el sitio que cada cual ocupa para ejercitar este derecho de ciudadanía, llegado este momento lo hicieran apartándose de todo egoísmo político; y sin tener en cuenta otra cosa más, sino que somos hijos de Adeje y que vamos animados del mejor deseo de laborar por el engrandecimiento de nuestro pueblo, como hermanos genuinos de esta Villa de Adeje, huérfana de toda protección y oprimida constantemente e inicuamente por el látigo del Feudalismo. Esto sería la mayor satisfacción como dejo dicho que había de recibir y así lo expreso del espíritu de rectitud de que todos os halláis animados.
Ahora bien: no quiero dar término a la presente, sin antes hacer unas pequeñas consideraciones, tanto sobre el estado económico del Municipio; como de algunos de los asuntos enumerados en la orden del día a la cual me refiero el principio.
Encaminada la liquidación del Presupuesto de 1932, me encuentro con que la deuda flotante del Ayuntamiento asciende a unas 58.864,81 de las que según informe verbal de Secretarias se hallan ya satisfechas unas 22.563 pesetas; quedando por tanto una deuda liquida de pesetas 36.240. Indudablemente para nadie es desconocido el estado de abandono por el que ha venido atravesando este Ayuntamiento, sino debido a las Corporaciones por su insolvencia de conocimientos en materia administrativa, a los caciques dirigentes anteriormente y al poco celo demostrado por los funcionarios que durante más de un lustro desempeñaron la secretaria, tal así que al formarse la cuenta a la que vengo refiriendo, fue poco menos que imposible por los errores contenidos en los libros de contabilidad y la falta de antecedentes, por todo lo cual debe estar dispensado el actual secretario, de cualquier defecto de que por esta causa pueda adolecer la liquidación de referencia.
Examinada la relación de deudores, de ella aparece que en valores existen pendientes de cobro una suma de 106.933,5 pesetas, claro está, con estos datos aparece que el Ayuntamiento se halla en situación francamente desahogada, pero no es así desgraciadamente porque según informes de dicho funcionario de la referida suma de valores falta según expediente levantado en 10 de noviembre del año último de 1932 más de 51.441,69.
Indudablemente ustedes dirán: ¿Y quién son los responsables? ¿Quién los malversadores? Y a esto contesto; como dije al principio de esta moción: no he venido aquí con ánimo de persecuciones aunque en el presente celo no se podría tomar como persecución sino más bien, como defensa de los intereses comunes que nos están confiados, no obstante y teniendo en cuenta que todo lo que hicieran esos administradores, se pude tildar de malo y vituperarlo y que es necesario tener el ánimo sereno ante el magno problema planteado por la nueva era que nos ha traído el luctuoso fin del Antiguo Régimen; así que en cuanto a las responsabilidades de los exconcejales sólo cabe exigirles por malversación justificada o por negligencia y omisión en la Recaudación de los ingresos municipales, en cuyo criterio se inspiró el artículo 27 de la ley de Presupuestos del Estado de 28 de julio de 1898, responsabilidad que queda en pie para exigirla a su tiempo oportuno; para no recordar los antiguos tiempos que a cada renovación bienal de los Ayuntamientos ocurría que los alcaldes entrantes pretendían exigir inmediatamente responsabilidades a los exconcejales con lo cual se creaba un estado de perturbación y desasosiego ante el clamoreo de los perseguidos, yo propongo que para evitar todo ello y sin que esto quiera decir que nos hacemos solidarios de nada, sino antes por el contrario eludiendo toda clase de responsabilidades y haciéndonos sólo responsables de nuestra actuación; prescindamos de lo pasado y procuremos la tranquilidad de todos , toda vez que los actos no razonados y justificados se hallan siempre expuestos a represalias y que sería el cuento de nunca acabar, si el cambio de personal en los Ayuntamientos implicara la residenciación, el enjuiciamiento de los Alcaldes y Concejales salientes por los entrantes.
Pasando ahora a la orden del día, yo debo hacer una aclaración sobre todo con referencia a su apartado 5º: Acordar lo que proceda para el arreglo de la Calle Principal y abastecimiento de aguas del vecindario por medio de instalaciones públicas.
Ya dije anteriormente, que si por algo quería venir a ocupar este puesto, era solamente animado del sano propósito de ver si algo bueno podía iniciar y ejecutar para el engrandecimiento del Pueblo en lo que siempre he puesto mis mayores desvelos, pero sin que esto quiera decir que amor quita conocimiento. Dado el estado actual de la Hacienda Municipal, no veo otro medio de afrontar una obra de tal magnitud, sino apelando al empréstito, lo que implica crear un gravamen más sobre los recursos del Ayuntamiento, que a la vez nos podría traer consecuencias lamentables. Por esta razón si vosotros lo acordáis yo también lo acuerdo y lo pondré en ejecución ya que ello es mi mayor obligación, pero os llamo la atención para que lo penséis y discutáis detenidamente, a fin que el día de mañana, si por alguna causa no prevista el Ayuntamiento tiene que hacer sacrificios para su amortización o sufriera algún quebranto por no allegar recursos suficientes para poder solventar el compromiso, no eludáis vuestra aquiescencia.
Termino pues está moción, con un entusiasta y ferviente Viva para nuestro pueblo, excitándoos una vez más a una estrecha compenetración unánime en los asuntos Administrativos que nos están encomendados desde que nos posesionamos, único modo de lograr el fin apetecido. He dicho. Villa de Adeje 18 de Mayo de 1933.- El alcalde- Presidente José Esquivel."
Don José Esquivel Alayón fue Alcalde de Adeje desde el 10 de abril de 1933 hasta el 19 de marzo de 1936.
Preside la Comisión Gestora que está a cargo del gobierno Municipal del 1 al 22 de agosto de 1936 en que es destituido por el Teniente de Asalto Don Esteban Company Ribera, cumpliendo la orden del Gobernador Civil de la Provincia, en este acto finaliza el periodo republicano en la Villa de Adeje.
El 13 de julio de 1933, el Ayuntamiento pleno de Adeje, es sesión ordinaria, bajo la presidencia de José Esquivel Alayón junto a los señores concejales Manuel Ferrera, José Carballo, Claudio Clemente, Cristóbal Morales, Francisco Lima y Federico Rivero propusieron la creación de una biblioteca pública municipal. Esto obedece a los postulados políticos de la II Replública. A continuación reproducimos el acuerdo plenario:
"Biblioteca Municipal. Siguiendo el orden del día se dio cuenta por lectura íntegra, de los informes que han emitido las Comisiones Municipales de Instrucción Pública y de Hacienda y Presupuestos en el expediente que se ha tramitado por anterior acuerdo del Ayuntamiento a consecuencia de la Moción de esta Alcaldía proponiendo la creación y funcionamiento de una Biblioteca Pública Municipal en esta villa haciendo uso de los beneficios que concede el Decreto del Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, fecha 23 de junio de 1932; y, después de una breve discusión, en la que intervienen los señores Clemente Alayón, Carballo Alemán, Lima Trujillo, Ferrera González y Morales Socas, mostrándose todos ellos decididos y partidarios de llevar a cabo cuanto antes aquella iniciativa, que tanto ha de contribuir a la cultura de este vecindario, se acuerda por unanimidad lo siguiente:
PRIMERO: Solicitar a la Junta de Intercambio y Adquisición de Libros para Bibliotecas públicas del Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes, la creación de una Biblioteca Municipal en este término
SEGUNTO: Ofrecer y habilitar, para la instalación de la expresada Biblioteca Pública Municipal, el local propiedad de este Ayuntamiento, sito en la planta baja de la Casa Consistorial, que por su independencia y distribución asume las condiciones que se señalan en el artº 3º del Decreto de 13 de Julio de 1932.
TERCERO: Que para hacer frente a los gastos que se harán de originar, caso de accederse a la creación de la biblioteca, tanto los iniciales de material y mobiliario e instalación de alumbrado necesario, como los de entretenimiento y remuneración del personal que haya de encargarse de este servicio público, se habilite el oportuno crédito mediante suplemento con cargo a los sobrantes y sin aplicación del vigente presupuesto ordinario, sin perjuicio de incluir en los presupuestos sucesivos la consignaciones que sean precisas para el normal sostenimiento de esta cultural atención.
CUARTO: La proyectada Biblioteca municipal funcionará de acuerdo con lo que se dispone en los artículos 2º y 3º del mencionado Decreto de 13 de julio de 1932, bajo la dirección de un organismo especial que se denominará “JUNTA DE LA BIBLIOTECA MUNICIPAL DE LA VILLA DE ADEJE”, que salvo lo que pudiera disponer la superioridad, estará constituida del modo siguiente: Presidente, el que sea el presidente de la comisión municipal de Instrucción Pública ( en este caso Don Manuel Ferrera González), vocales: en representación del Casino Principal, su `presidente, en representación de la Federación Obrera, su presidente, y como personalidades destacadas por su competencia, Don Pedro de las Casas Pérez, médico titular, Don Manuel Penillo Pérez, maestro nacional y en representación del magisterio nacional Don Agustín Sandoval Multeras, que sería el secretario de la Junta.
QUINTO: Se autoriza al Sr. Alcalde Presidente para que en nombre y representación de este Ayuntamiento y con facultades tan amplias como en derecho se requieran, formule la oportuna solicitud para conseguir la finalidad indicada, realizando cuantas gestiones sean conducentes a ello y suscribiendo cuantos compromisos se deriven de los acuerdos que anteceden."
En la Sesión del Ayuntamiento Pleno del 19 de marzo de 1936, se reúnen en la Sala Capitular los concejales que van a formar parte de la Corporación Municipal, en virtud de la designación hecha por el Gobernador Civil, designado por unanimidad a Don Ricardo Trujillo Robayna Alcalde-Presidente.
En la Sesión del Ayuntamiento Pleno del 4 de junio de 1936, reunidos los señores miembros de la corporación bajo la presidencia del Alcalde Accidental Don José Guirola Esquivel, se procede a la elección de Alcalde tras la renuncia de Don Ricardo Trujillo Robayna, siendo designado por 8 votos a favor Don José Guirola Esquivel.
En la Sesión del Ayuntamiento Pleno del 1 de agosto de 1936 está a cargo del gobierno municipal una Comisión Gestora presidida por Don José Esquivel Alayón.
En la sesión del 22 de agosto de 1936 bajo la Presidencia del Teniente de Asalto Don Esteban Company Ribera en delegación del Gobernador Civil de la provincia, finaliza el periodo republicano en la Villa de Adeje, se convoca a los miembros de la Comisión Gestora Don José Esquivel Alayón y a Don Juan Esquivel Castellano para comunicarles la destitución de dicha Comisión Gestora, y la designación de los nuevos miembros, nombrando Presidente a Don José de León Prieto, vicepresidente a Don Guillermo Medina Bonetti y como gestores a Don José Trujillo Bello y a Don José Carballo Alemán.
